El perfil de un agresor
- Dra. Elba Rivera González
- 18 ago 2021
- 3 Min. de lectura
Por Dra. Elba Rivera González /PERIODICOELLAURELPR.COM
A pesar de los esfuerzos del gobierno para minimizar o erradicar la violencia de género en Puerto Rico, al momento este sigue siendo un problema de salud pública. Por otro lado, el área de ciencias de la conducta ofrece sus servicios a la victima de violencia. Sin embargo, existen pocos centros para trabajar con el agresor/a. Debido a la magnitud del problema se han llevado investigaciones dirigido a establecer el perfil de un agresor/a. El propósito de este articula es educar a la población a conocer a un/a maltratante.
Según el estudio realizado por Oliver, Vidal, Aquino y Rivera (2019), indican que los/ as participantes describen que durante el patrón de violencia se encuentra lo siguiente: humillaciones 36 %, amenaza con objeto o arma de fuego 5 %, halar el pelo, empujar y pegar 15 %, golpear un objeto o dar un puño a la pared un 27 %, el/la agresor/a amenaza con suicidarse un 2.3 %, culpabiliza al otro del acto, le dice como vestirse y con quien puede o no puede hablar. Cónsono con esto, es lo expuesto por Fernández, Quiñones y Prado (2019) donde señalaron que los agresores intentaban controlar la conducta de su pareja, las amenazan o intimidan como medio para controlarla y en algunos casos actos humillantes o de crueldad hacia la víctima. Adicional, indican que un porciento menor de mujeres víctimas de violencia, no denuncian la situación, por el bien de los hijos o por garantizar los bienes adquiridos a través del matrimonio. Por otro lado, Trujano, Martínez y Camacho (2009) sostienen que existe violencia doméstica hacia los hombres, Sin embargo, solo una minoría reportan los hechos debido al papel que ellos desempeñan socialmente. Es por tal razón que Bosch (2016), considera a las creencias un factor de riesgo sociocultural para la ocurrencia de la violencia de género. Esto requiere que se eduque a la población y se trabaje con su sistema de creencias. Es importante recalcar que los roles no tienen género, por lo tanto, los mismo le pertenecen de forma igualitaria a los sujetos.
Debido a lo antes expuesto, Echeburúa y Amor (2016), llevaron a cabo un estudio para crear un perfil del agresor y concluyeron que los trastornos más relevantes de estos sujetos, fueron el abuso de alcohol/drogas, los celos patológicos y los trastornos de personalidad (antisocial, límite, narcisista y paranoide), así como los déficits psicológicos de estas personas, tales como el pobre control de la ira, las dificultades emocionales, las distorsiones cognitivas, la baja autoestima y problemas de comunicación y dificultad en la solución de problemas. Si es cierto que no existe un tipo de maltrato, también es cierto que cada agresor/ a posee diferentes características. Sin embargo, existe una serie de características que tienden a ser comunes entre los agresores/as, entre las cuales se encuentran las siguientes: Suelen tener buena imagen pública, sentimientos de inferioridad y baja autoestima, motivación por el poder, /internalizan estereotipos de género, poseen falta de asertividad, mantienen relaciones de dependencia, tienen inestabilidad emocional e impulsividad, son egocéntricos, presentan celos y son posesivos/as, poseen niveles bajos de empatía, minimizan la violencia o culpabilizan a los demás y poseen habilidad para la manipulación.
Se hace necesario concienciar a la población para que aprendan a identificar conductas violentas que inadvertidamente se tienden a dar como algo natural, normal y correcto en las relaciones de noviazgo y en el matrimonio. Es importante señalar que las conductas violentas en las que se ejerce poder y control pueden constituir el comienzo de otras conductas más graves. Si tu pareja presenta algunas de estas características busca ayuda profesional. Por otro lado, el gobierno de Puerto Rico cuenta con centros de ayuda para las víctimas de violencia doméstica. La página de la policía de Puerto Rico tiene disponible el plan de escape: https://policia.pr.gov/.../plan-de-escape-para-victimas.../
“Ni golpes que duelan ni palabras que hieran”

Comentarios